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La estrella radiante |
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Señor, Permite que yo vea siempre La Estrella Radiante, Mostrándome el camino a seguir. Sé que no traigo conmigo, Ni oro, ni incienso, ni mirra, Nada tengo, sino mi ser, Pero sé también, Que nada pides además de eso. Soy el oro, El incienso y la mirra, Siguiendo la Estrella diferente Y especial, Buscando tocar, Ni que sea por un segundo, El Rey de la Navidad. Nada te doy, que ya no tengas, Pero recibo de Ti, Todo lo que necesito!... Eres Tú el Niño que busco Y la propia Estrella que me guía, Con luz y brillo; Yo vine para adorarTe Y vinieste para me iluminar.
Letícia Thompson
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